Llama GRATIS 917 715 333

Viva Alema

Sirva nuestra historia como un halo de esperanza a todas aquellas parejas que desean ser padres y como agradecimiento al personal de Ginemed Sevilla por ser como son... hay algunas cualidades que no se ganan terminando los estudios...

Nunca me planteé tener hijos pero al conocer a mi mujer pensé que al menos uno tendría, nos fuimos a vivir juntos, nos casamos y fuimos dejando pasar el tiempo ( AY!! SI supiéramos que al final el tiempo iría en nuestra contra).

Cuando por fin nos decidimos a intentarlo rápidamente se quedó embarazada, era una alegría tremenda a la vez que un miedo y una responsabilidad, pero jamás se me pasaba por la cabeza que no saldría bien, la palabra aborto (que luego nos acompañaría durante varios años) ni siquiera rondaba en mi vocabulario, todo eran alegrías, ganas por contárselo a todo el mundo y gritarlo a los cuatro vientos y así fue, todos muy contentos hasta que llegamos a esa primera visita... el ginecólogo que nos atendió supongo que por lo acostumbrado que estaría tan solo dijo de una manera muy fría "SE HA PARADO" aún retumban en mí esas palabras y ese tono de voz aunque no le pongo cara, mi mente se nubló y caí a la silla, no me lo podía creer, no articulé palabra alguna y a mi me sobran siempre, mi mujer fue la que tomó las riendas y empezó a demostrarme lo fuerte que era pensándose ella que era frágil. Preguntó , bueno y ahora qué... ya os podéis imaginar.

Seguimos intentándolo pero no venia, no llegaba, lo que llegaba era una presión tremenda, se quitaban las ganas de seguir buscándolo, hacer el amor ya no era hacer el amor, y una parte de la relación se iba resquebrajando a la vez que amigos iban teniendo hijos y todo les salía bien.

Decidimos contactar con Ginemed al principio era todo ilusión, todo positivismo, éramos una pareja fácil nos dijeron... así que pedimos un préstamo a los que siempre están ahí detrás para sujetarme y que le tengo que agradecer tantas cosas además de mi vida, y nos metimos de lleno en un ciclo con todo lo que conlleva sobre todo para la mujer aunque nosotros también sufrimos.

Tuvimos un primer intento... embarazo... otra vez ilusión, miedo... primera visita volvió a pararse... lo volvimos a intentar porque nos quedaban embriones... segundo intento... embarazo... menos ilusión, mas miedo... primera visita ok, segunda visita se volvió a parar... tercer intento y último... no embarazo.

Todo se nos cayó encima, no teníamos dinero para mas intentos, todo era pena, dolor, habíamos luchado y sufrido mucho, teníamos muchas esperanzas puestas, éramos una "pareja fácil" no encontraban el problema solo lo achacaban a la mala suerte porque los embriones eran buenos y se quedaba embarazada... pero eso no nos quitaba la pena y el dolor.

Después de mucho sufrimiento y desesperanza, hasta llegar a pensar cosas que antes ni se nos había pasado por la cabeza... unos meses después... el teléfono sonó... nunca descuelga a teléfonos desconocidos pero por alguna razón aquella vez sí lo hizo. Y esa llamada nos cambió la vida... "Alemania" nos llamaba... esa llamada hizo que lo pudiéramos intentar gracias sobre todo a esa gran persona de Ginemed ( él sabe muy bien quien es )... él lo hizo posible.

Aunque habíamos sufrido mucho y ella se había sometido a mucho dolor físico por tantas hormonas, abortos, etc... eran tan fuerte y era tan MADRE que dijo que hasta que no reventara ella lo seguiría intentando... asi que un nuevo ciclo... con esperanza... primer intento... embarazada... un embarazo con mucho miedo... no miedo clínico... miedo nuestro, ese miedo que se mete hasta las entrañas, ese miedo que te hace llorar por las noches, ese miedo que no te deja pensar en nada... y nos encontramos a una ginecóloga que nos dio la vida, la vida y la tranquilidad a través de sus palabras, de su trato, de sus favores... a cambio de chucherías 😉 ella se puso en nuestro camino para entregarnos en mano a nuestro hijo.

Estuvo cuidándonos ese maravilloso día, no era su horario, no le tocaba pero estuvo allí se entregó a nosotros como nosotros nos entregamos a ella. Nos dió la vida.

Y nuestra vida cambió, y en ese preciso instante no solo nació él, nacimos sus padres también y sus abuelos, nacieron todos esos instintos de padre que yo no tenia, nació la felicidad, nació la sonrisa verdadera, nació el AMAR, creo que hasta ese momento yo nunca había AMADO TANTO... ese momento exacto ese punto...( verdad mi vida?? )

Así que seguid, seguid luchando no desesperéis, nosotros estábamos desahuciados, problemas económicos, paro, endeudamiento por nuestro sueño... abatidos... y ahora estamos igual pero FELICES, tenemos una FELICIDAD tremenda en casa que nos sonríe y se nos quita todo, y es gracias a GINEMED.

Esta felicidad no se paga con dinero.

GRACIAS

Clínica de Reproducción Asistida Ginemed Sevilla (Central)


Grado de satisfacción con Ginemed

Primera visita de fertilidad gratuita

Solicita de manera gratuita la primera visita en tu centro más cercano