En muchas ocasiones, cuando una mujer es diagnosticada de endometriosis, solo prestamos atención a las opciones de tratamientos médicos o quirúrgicos disponibles para contrarrestar el dolor, para evitar la evolución de la enfermedad o para solventar problemas los reproductivos que podemos encontrar en estas pacientes.
Sin embargo, aunque a veces olvidamos su importancia, debemos ser conscientes de que unos hábitos de vida saludables pueden ayudar a controlar la enfermedad, sobre todo en lo que se refiere a la alimentación, pues hay productos que son claramente perjudiciales para esta patología.
Es interesante conocer que existen alternativas que nos pueden hacer sentir mejor y disminuir los síntomas:
- Evita el gluten. Cada vez es mayor la relación que existe entre la endometriosis y la intolerancia al gluten. Una dieta libre de gluten a largo plazo, evitando productos como las harinas, el pan, la bollería, la pasta, rebozados... puede lograr grandes mejoras de la sintomatología. Alimentos como el arroz, el maíz, las frutas y verduras, los huevos… están permitidos en este tipo de dietas.
- Menos azúcares. También limitar el consumo de azúcares, como el chocolate, los edulcorantes, productos ricos en azúcar y miel. La cafeína, sobre todo consumida en grandes cantidades puede incrementar los niveles de estrógenos, suponiendo esto un factor negativo para la endometriosis.
- Alcohol, solo en su justa medida. El alcohol, también es perjudicial ya que puede afectar a la función del hígado, que es el encargado de eliminar los niveles excesivos de estrógenos.
- Cambia los lácteos por las almendras. El calcio no solo está en los lácteos, que ayudan a estimular la producción de prostaglandinas, responsables de la inflamación y contribuyendo a empeorar los síntomas. También podemos encontrar calcio en las almendras, los higos, el sésamo, el salmón o las sardinas.
- Cuidado con las carnes rojas. Además de promover la síntesis de prostaglandinas, pueden haber sido tratadas con hormonas del crecimiento que puede tener actividad estrogénica.
- Cambia las grasas saturadas por más omega 3. Lo encontrarás en pescados como el salmón o las sardinas.
- Menos conservantes. Hay que intentar evitar productos procesados o congelados, ricos en aditivos y conservantes, y en la medida de lo posible escoger alimentos de producción orgánica, así como consumir menos hidratos de carbono refinados ( el pan, la pasta, repostería..) y más carbohidratos como los panes integrales o el arroz.
Recordad que una dieta variada rica en fibras con frutas y verduras, que nos suponga un aporte suficiente de vitaminas y minerales, junto con el ejercicio regular puede contribuir, además de a mantener un peso saludable, a controlar mejor los síntomas de la endometriosis.
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